¿Manias o hábitos?

Está claro que todos tenemos nuestras cosillas, unas pueden ser hábitos, como el de sentarse en el último asiento de la izquierda en el autobús, que tiene una explicación y es que es el único sitio (quitando los asientos que van "solos") donde no molestas a nadie si quieres salir o viceversa, además tienes a la derecha un sitio para dejar las cosas. Ésto sólo se cumple en los autobuses nuevos, en los otros elijo el asiento del centro en la última fila.
Otro hábito es el de situarse en la zona del andén más cercana a la salida de la estación de destino, creo que no hace falta que explique el por qué.
La última costumbre de la que voy a hablar es la de llevar el bolso a la derecha, supongo que es una cuestión de comodidad, pero está consiguiendo desgastar mis pantalones por el roce y lógicamente los menos resistentes son los que más me gustan, así que a ponerles parches.
Tengo que reconocer que de mayor, con eso de que se incrementan los vicios y manias, voy a ser un poco pesada, porque tengo alguno que otro, pero bueno... ya me encargaré de tener el colchón y la almohada a mi gusto, los armarios de toda la casa controlados (ésto le viene muy bien a mi madre cuando no encuentra algo) y hacerme comida sin texturas raras.